DERECHOS Y DEBERES
TUS DERECHOS COMO PACIENTE
Acceder a los servicios médicos cumpliendo con los trámites administrativos.
Acceder a los servicios y tecnología de salud garantizando una atención oportuna y de alta calidad.
Elegir libremente al médico e institución de tu preferencia, dentro de los recursos disponibles.
Identificar donde y a quien contactar para interponer una queja, sugerencia o felicitación, recibiendo una respuesta oportuna por parte de Cayre.
Atender con prioridad a los menores de 18 años.
Decidir si deseas o no participar de investigaciones científicas.
Ser informado sobre los costos por los servicios adquiridos para tu atención en salud.
Acceder a una segunda opinión médica, si así lo deseas.
Contar con servicios continuos y de manera integral.
Derecho a que tu opinión o la de tu representante sea tenida en cuenta para aceptar o rechazar cualquier tratamiento.
Recibir orientación adecuada, clara y sencilla por parte de los profesionales de la salud acerca de tu estado, procedimientos y tratamientos que se deban practicar durante la prestación de los servicios.
Derecho a que la información de tu Historia Clínica sea tratada de manera confidencial y sea conocida por terceros con previa autorización o por casos previstos por la ley.
Recibir un trato respetuoso, digno, cortes y humanizado por parte de los profesionales de la salud, respetando tus creencias y costumbres.
TUS DEBERES COMO PACIENTE
Brindar la información requerida para la atención médica de manera completa y veraz acerca de tu estado de salud, antecedentes clínicos y contribuir con los gastos según u capacidad económica.
Tratar con respeto al personal que te brinda la atención dentro de las instalaciones de Cayre, así como respetar la intimidad de los demás usuarios.
Asistir puntualmente a las citas, con documentos en orden e informar con 24 horas de antelación la cancelación del servicio.
Cumplir de manera responsable con las recomendaciones de los profesionales de salud que te atiendan.
Cuidar tu salud, la de tu familia y la de tu comunidad.
Tener la documentación completa para la prestación de los servicios.
Usar adecuada y racionalmente los recursos que te brinda el sistema de salud y cumplir sus normas.
Actuar de manera solidaria ante las situaciones que pongan en peligro la vida o la salud de las personas.
Cumplir con las recomendaciones médicas, seguir indicaciones de tratamiento durante su atención.